Debido a mis circunstancias de vida actuales, de un tiempo a esta parte solo puedo dirigir one shots, pero últimamente he pensado en plantearlos siempre como pequeños sandbox muy sencillos. Me llama la atención un planteamiento que leí una vez en el blog
The Alexandrian (no recuerdo ahora mismo en qué artículo exactamente) que venía a decir que el máster no tiene que preparar una trama, sino una situación de conflicto en la que se vean envueltos los personajes. Estos, al reaccionar a dicha situación, generan ellos solitos la trama.
El mes pasado dirigí un one shot de la segunda edición revisada de Fading Suns siguiendo este planteamiento. La partida tenía lugar en la ciudad de El Cubo, en el planeta Pandemónium, que viene muy detallada en la guía del director de juego. Los personajes eran una noble Al-Malik y su séquito, que acudían al planeta para tratar de encontrar a un viejo amigo perdido. Como máster, me inventé una historietilla sobre las peripecias que le habían ocurrido al PNJ en la ciudad, preparé algunos encuentros por toda la ciudad (unos relacionados con pistas sobre la desaparición del PNJ y otros, simplemente, para despistar o dar ambientación) y punto. No me llevó mucho tiempo de preparación y los jugadores se lo pasaron bien.
Como me ha funcionado bien, voy a tratar de aplicar esta idea de preparar situaciones y no tramas a alguna otra minipartida sandbox de un solo día. No sé cuánto dará de sí en una campaña de duración media o larga, empero.
¿De que viven y donde cagan los bichos que rondan por ellos?
Yo también he pensado en ello alguna vez. Cuando dirijo dungeons, muchas veces describo paredes llenas de meados. Es asqueroso, pero todo sea por la verosimilitud XD